El presidente Felipe Calderón presentó una iniciativa de reforma a la Ley Federal de Competencia, que busca castigar las prácticas monopólicas con cárcel y sanciones económicas más altas.
Entre los cambios enumerados por el Ejecutivo están otorgar a la Comisión Federal de Competencia (CFC) dientes para castigar de manera más eficaz las prácticas anticompetitivas, elevándolas al rango de delito sancionable con prisión.
Con esta propuesta, detalló Calderón, se busca terminar con la falta de competencia, ya que ésta es un freno a la inversión y el crecimiento; impide terminar con la desigualdad y la pobreza.
Ya que más de 30% del gasto de los hogares se destina a mercados en los que existen monopolios, lo cual incrementa hasta 40% el precio de los bienes y servicios.
Las sanciones económicas para las empresas que realicen prácticas monopólicas absolutas podrían ser de hasta 10% de los ingresos acumulables de la empresa para efectos del Impuesto Sobre la Renta (ISR), y hasta de 8% de sus ingresos para aquellas involucradas en prácticas monopólicas relativas.
Asimismo la Cofeco podrá obligar a los entes económicos a proporcionar información para elaborar sus opiniones y conducir estudios de mercado, pues actualmente, las opiniones de la Comisión se realizan con información pública disponible o la que de manera voluntaria proporcionan los agentes económicos.
La Comisión tendrá la facultad de ordenar la práctica de medidas cautelares y su ejecución, con ello podrá suspender actos constitutivos de probable práctica monopólica, con lo que detendrá a las empresas que violan las reglas de la competencia sin esperar que se terminen los juicios en la materia. La reforma -presentada por el titular del Ejecutivo en la residencia oficial de Los Pinos y enviada a la Cámara de Diputados para su discusión-, modifica la estructura de la Cofeco para transparentar sus procedimientos.
Fuente: el economista
