miércoles, 27 de enero de 2010

EMPLEO CRECE, PERO SE PRECARIZA

La contratación de personal en este arranque del 2010 será más selectiva y al dos por uno, ya que, dadas las condiciones, las empresas buscarán que una misma persona realice más labores para cubrir las vacantes que por la crisis vivida en el 2009 debieron eliminar.

“Aunque no es recomendable, podemos ver a algunas organizaciones que pretenden cubrir con una misma persona dos vacantes a cambio de salario y medio”, dijo Cristina Hernández, vicepresidenta ejecutiva de Recursos Humanos de la empresa consultora AXA.

De acuerdo con analistas en recursos humanos, se espera que haya una recuperación del empleo en el primer trimestre del año.

Sin embargo, ese empleo corre el riesgo de ser precario (trabajo eventual y con las mínimas prestaciones), hasta que no haya mejores condiciones de crecimiento económico.

Datos de la Encuesta Nacional de Empleo y Ocupación del INEGI del tercer trimestre del 2009 indican que hay 28.5 millones que tienen un contrato laboral, pero 35% de éstos tiene un ingreso menor a dos salarios mínimos.

Empleo de mala calidad
Graciela Bensusán, especialista laboral de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), consideró que las nuevas formas de trabajo (entre las que se encuentra el outsourcing) han contribuido a que, “en la medida en que el empleo se aleja de la empresa y de los contratos colectivos, el empleo sea de menor calidad”.

Agregó que en el país, los empleos permanecen con bajos salarios, con la consecuencia que “deje poco al país en términos de capacitación, de impuestos (porque no pagan al ser muy bajos), y evidentemente ése es un problema”.

Reconoció que hay ciertos sectores que tienen mejor calidad del empleo como el automotriz en la industria manufacturera, en comparación con la industria del vestido y la electrónica.

Al respecto, Enrique de la Garza, especialista laboral de la UAM, comentó que en México el desempleo no es el gran problema, sino la calidad de la oferta laboral, ya que “está empeorado porque son trabajos que no logran satisfacer las necesidades de quienes los realizan.

“Basta con revisar el número de trabajadores que se encuentran en el subempleo o en la informalidad y podemos detectar que los trabajadores mexicanos viven peor que antes de la crisis”, agregó.

Sostuvo que hay un importante número de trabajadores en esquemas de terciarización “y eso es deteriorar el empleo. La clave de esa fórmula es que permite disminuir los costos de la mano de obra e impone la flexibilidad de las condiciones de trabajo ante una indefensión de los empleados”.
Fuente: el economista


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