La eliminación de estímulos fiscales a la investigación y desarrollo es una medida que tiene pros y contras, considera el vicepresidente electo del Instituto Mexicano de Contadores Públicos, Francisco Macías Valadez. “Se estaba convirtiendo en un privilegio para las grandes empresas farmacéuticas y de telecomunicaciones, que obtienen grandes ganancias”.El experto señala que el beneficio fiscal se estaba utilizando indebidamente en planes de inversión en actividades de fomento, por lo que no se necesitaba en forma generalizada. Considera por ejemplo que no debería haber este tipo de incentivos para industrias como la cinematografía.
“Visto así, no debe ser problema, se estaba convirtiendo en un privilegio”, dijo.
El fiscalista explica que la promoción de inversiones en desarrollo y tecnología se da dentro de las mismas empresas. “Todos los fondos de tecnología los utilizan las firmas para sus propios productos y si se hace bien esa tecnología, al momento de vender sus productos, se tiene la retribución de esa inversión”.
En opinión del experto, lo que busca la autoridad es que todas las empresas de cualquier tamaño tributen igual, se les estaba dando privilegios a grandes empresas, farmacéuticas, telecomunicaciones, que tienen grandes ganancias.
“Se les daba estímulo para desarrollar mejores productos, mejores tecnologías, de alguna manera se les daban privilegios en comparación a las pequeñas y medianas empresas”, comentó.
Fuente:INSTITUTO MEXICANO DE CONTADORES PÚBLICOS