La reducción del número de diputados y senadores no daría mayores acuerdos sobre reformas en el Congreso, como prevé el presidente Felipe Calderón en su iniciativa de reforma política, ya que los legisladores no actúan con base en negociaciones individuales, sino que éstas se dan en el seno de los líderes de las cúpulas partidistas.
“La falacia reside en que ningún Congreso funciona sin agrupamientos partidarios y son ellos los ejes de los debates y acuerdos.
“En México, existe además un grado de disciplina partidista nada despreciable y son los representantes de las bancadas en el pleno o en las comisiones los que dialogan, se pelean, negocian y pactan. Y eso sucede no sólo en México, sino en todo el mundo, está en el genoma de todo Congreso.
“Los acuerdos fundamentales no se toman entre individuos, sino entre representantes de los subgrupos que integran el cuerpo colegiado que es la Cámara”, afirma el expresidentes del IFE, Jose Woldenberg.
Evitar sobrerrepresentación
El reto mayúsculo para los legisladores, en el marco de la discusión y aprobación de la reforma política, es no afectar la pluralidad en la representación ciudadana.
El presidente Calderón propone dar mayor eficiencia al trabajo legislativo y evitar el dispendio de recursos mediante la disminución de 128 senadores a 96 y de 500 a 400 diputados.
De prosperar su iniciativa, la Cámara de San Lázaro la conformarían 260 legisladores de Mayoría Relativa y 140 de Representación Proporcional, en vez de los 300 y 200 como actualmente sucede.
En el caso del Senado, la reducción se daría por la eliminación de la Lista Nacional correspondiente a 32 legisladores, por lo que el número de integrantes pasaría de 128 a 96.
De acuerdo con resolutivos del seminario de análisis de la reforma política que se celebró en el Senado, en el tema de la reducción del número de legisladores se debe de tener cuidado de no caer en la sobrerrepresentación, es decir, que los diputados representen a un mayor número de ciudadanos y se reste espacio a la pluralidad.
Si se toman en cuenta que existen 300 distritos electorales y 100 millones de mexicanos adultos, un diputado federal representa hoy alrededor de 333,000 ciudadanos.
De reduce a 260 el número de diputados de MR crecerá el número de ciudadanos representados por los diputados a 388,000 aproximadamente, según el analista Miguel Ángel Granados Chapa.
Reducción no implica ahorros
Un argumento del Ejecutivo federal para reducir el número de legisladores en el ahorro de recursos económicos.
En los últimos 10 años, el Poder Legislativo ha costado a los mexicanos cerca de 60,000 millones de pesos para el pago de dietas de senadores y diputados, así como de sus viajes, viáticos, asesorías y costos de operación de las dos cámaras del Congreso.
De acuerdo con Informe de gestión y actividades entre 1999 al 2009, el Senado de la República ha ejercido un presupuesto total de 20,646.1 millones de pesos, mientras que la Cámara de Diputados ha erogado 38,759.5 millones de pesos, lo que significa un total de 59,405.6 millones de pesos.
Destaca que si bien el Senado ha tenido una disminución paulatina de su presupuesto, pues tan sólo del 2008 al 2009 disminuyó de 3,318.7 millones a 2,992.8 millones, la Cámara de Diputados ha aumentado significativamente su gasto, ya que entre esos mismos años pasó de 4,730.5 a 5,284.6 millones.
A la americana
La reducción del número de integrantes del Congreso de la Unión sería comparable a la conformación del Legislativo de Estados Unidos.
En el continente americano -explica el senador panista José González Morfín, promotor de la disminución de legisladores- Estados Unidos y Colombia son las naciones con las que nuestro país guarda mayor identidad en este tema, debido a que en esos dos países, el Senado se conforma por 100 integrantes. En Estados Unidos, la Cámara de Representantes consta de 435 miembros.
González Morfín explica que en los demás países, el número de senadores se reduce en forma notoria, como es el caso de Brasil que con una población de más de 186 millones de habitantes, cuenta con sólo 81 escaños.
Por ejemplo, en Francia, los senadores son un total de 331. El Congreso Nacional del Perú es desde 1995 unicameral, compuesto por 120 congresistas elegidos por distrito para un período de cinco años, coincidiendo con el período presidencial.
En España, el Congreso de los Diputados está compuesto por un mínimo de 300 y un máximo de 400 diputados, siendo su número actual de 350.
El Congreso Nacional de Chile está compuesto por la Cámara de Diputados, de 120 miembros, y por el Senado, integrado por 38 parlamentarios.
Fuente: Encuesta de Consulta Mitofsky sobre la reforma política. Diciembre del 2009.
CREDITO:
Jorge Monroy / El Economista
